domingo, 13 de diciembre de 2009

Winter... about to come

El mundo se detiene solo para ti.
Aqui, entre mis brazos.
Por un dia, por una noche, por un momento en el que sonries
Nosotros rompemos el tiempo, en contra de todas las leyes.
Para siempre tu y yo.
Para siempre este instante.
"Für immer jetzt". Tokio Hotel.

Tengo móvil nuevo. Uno de esos tan geniales, un LG con pantalla táctil. Voy a ser la envidia de todos los frikis, podéis estar orgullosos de mí.
Sí, por si no lo habéis notado, hoy estoy feliz. Después de un sábado intensivo limpiando la cocina, una mañana de domingo con mi tazón de leche con colacao (soy pequeñita, lo sé) y haciendo trabajos para civil.
¿De verdad alguien es capaz de decir que prefiere el verano al invierno?
El verano es una estación inútil, en la que nunca puedes hacer nada de provecho. Porque tirarse todo el día en la playa, no cuenta. Y empaparse de 'Gossip Girl' tampoco.
Sin embargo, el invierno tiene sus tardes lluviosas, bebiendo chocolate caliente tranquilamente tapada con una mantita y leyendo un rato. Eso es gloria.
Además, es mucho más digno estar triste en invierno, ¿no? Estás acorde con el ambiente. Puedes tirarte llorando en el sofá toda una tarde, con un jerséi de cuello vuelto, pantalones largos, calcetines gruesos y unas zapatillas de pelo color rosa. En verano pareces idiota llorando el camiseta de tirantes. Es como si no le pegase, ¿verdad?
Igual son paranoias mías.

Tengo ganas de reírme, de ser feliz por un día. Pero no feliz de tener una casa grande, con jardín y unas flores bonitas. Sino de salir una tarde lluviosa al centro de Valencia, comprarme un paquete de regalices rojos y pasear por las calles pisando los charcos. Y luego volver a casa, quitarme la ropa y pegarme un baño de agua caliente.

¿A quién no le gusta el frío?

Ya está aquí el invierno, y dentro de poco la fiesta en la Mansión Grunge. ¿Te vienes?

1 comentario:

  1. Creo que me estoy haciendo mayor o algo porque hasta este año no compartía ni un poquito esa idea.
    Sin embargo ahora creo que tienes toda la razón. El placer de sentarme a las cinco a escribir y media de la tarde conuna taza de leche colacao café y canela (sí, todo junto) e ir viendo como fuera se va haciendo de noche y va bajando la temperatura... Eso no lo tengo en verano y lo cierto es que últimamente es lo que me da la vida.
    <3

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